Como es tradicional ese día muchos peregrinan hasta allí para elevar una oración a Dios por intercesión del santo.
Se invita a todos a acercar como colaboración un alimento no perecedero para Cáritas.

“Como hermanos, vayamos al encuentro de San Cayetano, nuestro amigo e intercesor. Vayamos con un corazón lleno de agradecimientos y cargado de pedidos, especialmente por los que no tienen trabajo”, señalaron desde el obispado local.