Por CARLOS ALVAREZ CORREA
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@la.voz.del.productor
Pequeño diálogo y dos grandes temas en el campo: La vacunación antiaftosa y la comercialización de hacienda.
De esta forma toman relevancia las Jornadas de “comercialización ganadera” realizadas el jueves pasado 9/11/2023 en Mar Chiquita, organizadas por la Sociedad Rural de Mar Chiquita y CARBAP.-
Roberto lo miraba y le decía: “¿Che, los de Chascomús fueron? ¡No!. La verdad no fueron.
Las 16 Asociaciones Rurales del Sudeste, dejaron el entretenimiento de las Exposiciones y tuvieron que “escuchar el clamor de los productores”: “Aflojen con la Aftosa”. Hasta ya le pusieron título a la novela: “El silencio de la Aftosa”. Todos hacen silencio: Fundaciones, Gobierno, y Entidades.
Las Asociaciones que si estuvieron en Mar Chiquita, propusieron: “Revisar los esquemas de vacunación: sin poner en riesgo el status de libre de aftosa, proponer que las vacas con más de 2 años, dejen de ser inoculadas”. Sería empezar un camino que aliviane la situación.-
Las Asociaciones tardaron años en comprender que la vacunación antiaftosa afecta mucho en los costos a los productores, de una enfermedad erradicada en el país y con rodeos inmunizados.
Ahora, en medio de tanto silencio, un grupo valiente de Asociaciones eligieron el camino inicial de “la declaración”. Es un avance y supone peticiones ante las Fundaciones Antiaftosas y el SENASA. Se verá si lo hacen.
También fue importante que en Mar Chiquita, se trataron temas del mercado de Carnes, como exenciones impositivas, estudios sobre el Balance de Carbono y acuerdos con Frigoríficos que concentre la comercialización de categorías terminadas “a pasto” entre otras.
Pero las Asociaciones se involucran en la formación del precio de la hacienda aceptando “la libertad de mercado” y hacen críticas a cualquier intervención del gobierno. Entonces. las Casas Consignatarias, los Feed Lot, los Frigoríficos y Supermercados, siguen fijando el precio de la hacienda. Son los titulares y beneficiarios de la libertad que las entidades defienden, mientras que el productor es el espectador de “lo que le pagan” los dueños de la libertad.
Recordamos “el comunicado CARBAP (24-10-23)”, defendiendo a un Consignatario que supuestamente era presionado por un Funcionario para bajar precios. Pero cuando el productor, en medio de la sequía, tenía que vender sus vacas y terneros obligado, vapuleado por los Feed Lot que le pagaban un precio vil, no hubo ningún comunicado de las Asociaciones.
Pero Roberto, en medio del barro apurado por vacunar, tiene que vender, y miraba el precio del ternero a $ 1100 el kg, pero está bajando y el Novillito estaba a $ 964 el kg, con tendencia a subir. Ahora tiene que esperar el ternero unos días por si cambia la tendencia a la baja y vender novillitos rápido antes de fin de año. Pero en dos o tres días se juega el futuro.
Pero sabe dos cosas el productor: los precios no cubren los costos y nunca alcanzan a la inflación.
En el 2022 la hacienda aumentó un 42 % y la inflación fue de un 95 %, con un atraso de un 53 % en la hacienda. Este año 2023, la hacienda aumentó el 145 % pero la inflación alcanza el 102 %. (Indec y Rosgan). Todavía la recuperación de precios de la hacienda no alcanzaría a la inflación. No hay rentabilidad todavía en los ganaderos tranqueras adentro.
El sector no necesita un nuevo presidente para poner mayor justicia en la cadena de carnes.